lunes, marzo 03, 2008

La avaricia (¿rompe el saco?)


¿Soy o no soy avara? ¿Me puede la codicia? Normalmente se piensa que la gente avara es la que logra (a costa de pisotear a los demás) llegar alto, hacia donde quiere. La justicia divina que tanto castiga este pecado capital no funciona aquí en tierra de desterrados.
Bajo ese extremista enunciado, es muy difícil (si uno no es un Donald Trump) considerarse avaro. Pero la avaricia está mucho más cerca y a menor escala. Yo diría que nos ronda a todos, sigilosamente, como una serpiente con su lengua bífida.
¿Deseáis tener todos los discos de este artista que os gusta? ¿Queréis compraros ese coche que ha salido en los anuncios? ¿Planeáis unas super vacaciones donde la palabra clave sea lujo? Entonces quizá seais un poco avaros...
Parece que la sociedad actual, definida constantemente como consumista, es avara en objetos y no tanto en economía. Préstamos por doquier para conseguir mejores casas, coches, vacaciones o hasta un lote de DVD's en ebay, en aras de hacer la vida totalmente cómoda (esos sofás de lujo que permiten engordar de manera absurda mientras se ve la sobrevalorada cadena televisiva de turno). También merece la pena reseñar esa enfermedad del S.XXI llamada síndrome de Diógenes: guardar todo lo que se pueda dentro de casa, aunque sea preciso dormir en el descansillo.
En definitiva, todos somos un poco avaros a nuestra manera, ¿o no? Creo que en este pecado capital, el problema está en llevar la avaricia al extremo, a invadir al prójimo para lograr un beneficio personal...

He aquí un ejercicio de higiene mental para saber nuestro grado de avaricia: Hay 10.000 cajas en una habitación, una te mata y cada una de las 9.999 restantes te da 1.000 euros. ¿Cuantas cajas abrirías? Yo, la verdad, me lo tendría que pensar mucho para abrir alguna caja...

Para ver: La avaricia, de Erich Von Stroheim.
Para leer: Hegemonía o supervivencia. La estrategia imperialista de EEUU, de Noam Chomsky.

Ilustración de Craze One.

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15 Comments:

Blogger Masmi said...

Yo creo que este va a ser de los pecados que menos voy a tener.
Me declaro poco consumista, con interes nulo por adquirir objetos, y menos pensando que me van a traer felicidad.
Reconozco que cuando he podido me he permitido ciertos lujos, pero me encuentro en una fase de desapego por lo material.
Voy a comenzar a levitar, jajaja

3:01 p. m.  
Blogger Cvalda said...

Me parece que me voy a apuntar tus recomendaciones para ver y para leer ^^
No me considero especialmente avariciosa en comparación a otras personas, pero quizás debería controlar un poco mi ansia de caprichos (que termino por no consumar nunca ¬¬)

3:10 p. m.  
Blogger Unknown said...

Abriría hasta pagar la hipoteca, por lo que sospecho que moriría.

4:31 p. m.  
Blogger Unknown said...

Empezaste por la avaricia. Me cachis.

4:32 p. m.  
Blogger Celestina said...

Masmi: estás hecho un b udista!

Cvalda: Voy a hacerlo con todos los pecados :) AMEN!

Fanma: Fallaste, va por orden alfabético, como podrás ir comprobando. Por cierto... estás seguro que abrirías las cajas?

5:53 p. m.  
Blogger Andrés A. Villalobos Vargas said...

ese ejercicio está excelente... en 10 minutos abrió un debate fuerte con mis compañer@s de departamento...

el que voy a esperar con deseo es la vanidad...

6:02 p. m.  
Blogger Unknown said...

Creo que alguna que otra si abriría. 1 probabilidad entre 10.000 es muy bajo. Seguro que es menos peligroso que montar en moto.

7:33 p. m.  
Blogger Denise said...

Mjm... no sé. Creo que todos buscamos la comodidad, cada quien la entiende de forma personal. De eso depende cuan avaricioso seas, creo yo.

Yo no creo serlo mucho, al menos no objetivamente (coches, lujos, etc) pero sí que hay cosas que guardo y guardo y no presto (por ejemplo los libros, son miooooos, mi tesoro).

7:46 p. m.  
Blogger Murasaki said...

Yo, como buena chica capricornio, soy una avara BUAJAJA...no, la verdad no tanto, pero sí que me gustan el lujo y la comodidad.

Pero como tú bien lo dices, lo importante es no irse al extremo, ni mucho menos dañar a nadie por un capricho material. Y también creo que llega el punto en que tanta acumulación termina por ahogarte :P

No sé si me animaría a abrir ninguna caja...

10:06 p. m.  
Blogger Istar said...

yo no abro ni una!!! La avaricia no es el que mas me toca...espera a llegar a la pereza, la gula y la lujuria...esas sí! bueno, la lujuria menos de lo que me gustaría para que mentir...

11:06 p. m.  
Blogger Unknown said...

bueno... el consumismo es una caracteristica principal de esta epoca en el mundo y es muy dificil no caer en el. yo lo que pienso es... que esta bien tener y querer, mientras se tenga presente el dar. creo que mientras mas tu das... mas recibes...!! por lo cual el "pecado" ya quedaria absuelto, y viviriamos un poco mas conformes.

2:21 a. m.  
Blogger Celestina said...

Meleobro: A mi el debate me lo abrio en mi cabeza.

Fanma: También tienes razón...

Denise: avara cultural? :P

Murasaki: Sí, el punto está en no llegar al extremo.

Istar: jijijiji pues ya tendrás tu momento de gloria en próximas entregas.

Alex: Sí, es verdad, deberíams dar!

9:32 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Yo abriría cajas, aunque con la suerte que tengo..en la primera la palmo fijo!!!jejejeje
Una posibilidad entre 10000 es muy poco,lo que no sé es hasta dónde llegaría.
soulwoman

1:25 p. m.  
Blogger Celestina said...

Soulwoman... es difícil.

Denise: yo peco de lo mismo!

11:43 a. m.  
Blogger Paolat De la Cruz said...

hasta matarse trabjando par atene rmcuho dienro y gastarlo en lujos, tambien aporta un poco de avaricia.

ajajajajaj

12:16 a. m.  

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