Parece que poco a poco todo va volviendo a la normalidad (pero muy poco a poco), los pajaritos cantan, las nubes se levantan y yo actualizo mi blog... ay, qué felicidad... ni la cenicienta cuando dejó de limpiar era más feliz que yo.
Y es que por fin soy un ser sociable, y me salen planes constantemente (bueno, tampoco soy marimóvilcomunicando, pero no me puedo quejar). Hace más de una semana que no paro, y eso está bien, aunque ande con un poco de estrés y necesite un día para ver pelis en un sillón y no hacer nada más.
Es que estoy irreconocible, ayer me dio la neura hay-que-limpiar, justo después de cenar, y hala, ahí voy como una loca con mi palo y mi fregona a limpiar el baño, los cristales del salón y parte de la cocina... me tuve que parar a mí misma, porque el asunto se ponía complicado por momentos... bufff... en serio os lo digo, el Supradyn Activo es mu bueno, te hace revivir hasta en esa semana tan femenina... estoy hiper-activa (teniendo en cuenta que normalmente soy hiper-pasiva).
Por otro lado... no hay mucho que contar, sueño con un calco supertrasto que me permita chocar con todos los coches que quiera y mojarme el culo hasta límites insospechados... mientras tanto miro la vida pasar, por el momento... (para los profanos la letra es de fangoria).

Celestina lee: El código Da Vinci (que nadie me mate, por favor)
Celestina escucha: Goddess in the doorway (Mick Jagger)
Celestina ve: La costilla de Adán (Katharine Hepburn y Spencer Tracy, perrrrrdooooonnnnn).
Un beso para la rata, que como no me siento muy Elvira Lindo últimamente, no le nombro nada, pero está en mi memoria...