martes, agosto 31, 2004

Bueno, no podía retrasarlo más, y, tras varios incidentes con el ordenador (cómo no, hay manitas, manazas y patitas de paloma), he conseguido llegar a mi tan querido blog.
Primeramente quiero felicitarme (ese ego, ese ego, eh, eh) por haber llegado a las 200 visitas... ya lo hice con las 100 y siento deciros que lo haré con las 300... porque esto sigue y sigue...
El sábado (el día que pusieron la bomba allí los de ETA) fui a (A/La) Coruña. Ciudad maravillosa, encantadora, con puerto de mar, chiquitita, coqueta, casi cosmopolita (no tiene Fnac, Vips o Starbucks)...
Mi primera parada fue en casa de la familia... quién mejor que ellos para hacer de guías turísticos de excepción. Así que, con la familia en pleno, nos fuimos al Museo de las Ciencias, un pequeño pero agradable museo dedicado a la contaminación, el reciclaje, la gravedad, el peso específico, la densidad... en fin, un poco de ciencia explicada para niños. El museo en sí no tiene gran cosa, pero lo puedes tocar todo, hacer experimentos, y muchas más cosas. Su situación es casi idílica, está dentro de un parquecito en el que justamente se celebraba una romería anual, así que estaba aquello lleno de tenderetes de churros, empanada, pulpo y demás golosinas gallegas.
Posteriormente nos fuimos al Aquarium Finisterrae (Casa dos peixes). Es un acuario que a punto estuvo de cerrarse cuando el Prestige (esos hilillos), porque está justo en la costa, y tomaba agua directamente del mar... pero al final no lo cerraron. Tiene peces (número de especies limitado), y unas cuantas focas aburridas al sol. Pero el sótano es precioso... está acristalado y alrededor es todo una gran pecera llena de todas las especies que tienen. Además parece un barco, pero intelectual, con mesa de escribir (de las más bonitas que he visto) y todo.
Bueno, luego parada y fonda en casa de la famila (lejana pero cercana), para comer. Lo que más extraño luego de galicia es lo que como, y lo rico que está todo!!!
Posteriormente, para no perder mucho tiempo, nos fuimos (ya toda la familia no, las abuelas no aguantaron tanta marcha) al Domus (Casa del hombre). Un museo encantador, con tres pisos enteros para saber cómo te late el corazón, cuánto pesas, cuánto mides, cuál es tu potencia dándole a una pelota, cuánto puedes llegar a saltar... también muy didáctico (estos museos viven de las excursiones de colegios de toda Galicia, me apuesto lo que sea), y lo puedes tocar todito... menos los corazones en formol y esas cosas.
No hay visita a Coruña que se precie sin pasar por la torre de Hércules, y eso fue lo que hice tras dejar atrás el Domus y unos cuantos semáforos en rojo (lamentablemente no llevaba yo el coche). Subimos a la parte del faro, hay unas vistas preciosas, y una rosa de los vientos muy parecida a la que hay en Lisboa donde el Padrão dos Descobrimentos, en Belem. También se ve la parte en la que encalló el petrolero Mar Egeo... y lo que queda de él (Una bocina que hace de escultura, pero queda muy bien). Tb se ve un poco Coruña y mucho mar.
Por último no se puede ir uno de Coruña sin ver la plaza del ayuntamiento (María Pita, con estatua de la heroína incluida)... una de las plazas más bonitas que he visto yo en mi vida... Qué edificios, qué conservación, qué todo (ni que me pagaran por elogiar la ciudad, coño). También dimos una vuelta por el centro histórico (ellos le llaman la ciudad vieja), y es precioso, lleno de comercios insertados en edificios de hace dos siglos, con esas terrazas acristaladas tan típicas!!!!
Qué maravilla de todo.
Y luego nos fuimos a casa, no sin antes perdernos por la maravillosa carretera de la coruña... mmm, qué alegría conocer los pueblos de alrededor cuando estás matada y quieres dormir porque te has levantado a las 8 de la mañana... y no llegas nunca a casa... pero bueno, esto ha sido todo... c'est fini!!! (que no es poco)


2 Comments:

Anonymous Anónimo said...

me he leido algo asi como tus ultimos siete comentarios y no he hallado ninguna referencia a mi persona, al mismisimo Luis Enrique, al que cuando estamos a solas dices querer mucho y otras pijaditas. En fin, sí, son celos, envidia, ansias de protagonismo o simplemente carencia de cariño, pero o me mencionas o dejo de ser uno de los visitantes de tu blog (se que eso te duele mucho, se que es lo que mas te duele) yo,a quien se debe unas 50 visitas de esas 200 (si no mas).
Ultimatum

5:46 p. m.  
Blogger Arturo J. Paniagua said...

Ehhhh Ehhhh Ehhhh, yo soy las al menos 75 visitas de esas 200 (no tratamos de hundirte querida Paloma, pero es la verdad), y de mi definitivamente aquí se habla poco, más que nada porque ya el teclado se sabe el nombre Paloma y lo teclea solo cuando entro a escrinir en el blog.

Estos rojos, peludos, filmoteconomos que ansias de protagonismo

;)

1:41 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home